Lo mejor su ubicación, en pleno centro. Decoración de estilo antiguo con una lámpara y barandilla impresionantes. Las habitaciones de buen tamaño y las camas cómodas. Tiene una terraza exterior interesante. Por destacar algo a mejorar decir que el comedor del desayuno es pequeño y la bolleria no muy buena; desde la habitación se oye la bomba del WC de otras habitaciones y las campanas tocan cada 15 minutos.
Dentro del pack del viaje incluía una cena en el restaurante que se encuentra a unos 200m del hotel. Muy ámplio y tranquilo. Comimos muy bien (elección entre 3 primeros y 3 segundos y varios postres). Luego nos obsequiaron con unos licores. Agradecemos a todo el personal el trato recibidoMás
- Wifi gratuito
- Aparcamiento gratuito