Molino del Canto es un lugar muy acogedor en un entorno maravilloso. Javier, Valvanera y su peque son amabilísimos y están pendientes de todos los detalles. Las rutas ornitologicas con Javier son muy recomendables, divertidas y siempre sorprendentes. Los desayunos y cenas exquisitos, con productos ecológicos y de la zona. El alojamiento impecable, cómodo y tranquilo. Es un autentico placer disfrutar de unos dias de descanso en Molino del Canto.