La casa rural es muy bonita, es acogedora y te ofrece la tranquilidad del campo a solo unos minutos de Madrid. Está muy bien decorada (parece de revista) y súper limpia. Hemos ido 7 adultos y tres niños y hemos estado mejor que en casa. El exterior lo hemos disfrutado muchísimo, hemos hecho barbacoas, tomado el sol, jugado al fútbol, hay muchísimo espacio para que los peques corran sin problemas. Pero sin duda lo que ha marcado la diferencia ha sido Diego, un anfitrión que nos ha hecho sentir muy a gusto. Nos ha dado la privacidad que necesitábamos pero también nos ha mostrado los encantos de la zona, sus castillos, su museo del aceite, sus riquísimos aceites, sus torrijas, bizcochos, su huerto, sus animales y sobre todo su simpatía. El 70 cumpleaños de mi madre no podía haber sido mejor. Sin duda repetiremos.
Fui con mi familia a esta casa rural a pasar varios días, incluido Nochebuena. El lugar es encantador, a 10 minutos a pie del pueblo más cercano y a veinte minutos en coche de Toledo.
La casa es bastante grande, tres habitaciones amplias dobles (una de ellas con literas) y sobre ésta última un altillo con otra cama doble. Todas con su propio baño.
Aparte, al lado de la casa con acceso exterior, otra habitación con una enorme cama de más de 1.80 y otra de 1,10 creo. También con su propio baño.
Salón comedor gigantesco, con cocina unida mediante una barra. Está totalmente equipada con inducción, horno eléctrico, microondas, lavavajillas, nevera y lavadora. También menaje con todo, ollas, sartenes, platos, cubiertos... para al menos doce personas.
Y ahora lo menos bueno: aunque el salón comedor consta de una chimenea que calienta todo se echa de menos sistema de calefacción pues en las noches más crudas en las habitaciones se puede pasar algo de frío.
En la habitación exterior si que hay una placa eléctrica ya que el calor de la chimenea no llega. Pero huele un poco a humedad. Hay también algunas contraventanas que faltan.
Tuvimos algún problema de fontanería que el dueño resolvió enseguida. Además los sanitarios están algo sueltos, y las puertas al ser todo de manera a veces les cuesta encajar.
Resumiendo, una casa estupenda para pasar unos días en familia muy tranquilos.
El dueño es absolutamente amable y con total disposición a cualquier hora para lo que necesites.
Sin embargo creo que necesita algún mantenimiento para ser perfecto.