Se trata de un pequeño hostal que lo regenta un matrimonio encantador. Son muy atentos y no escatiman a la hora de recomendarte sitios y facilitarte información de los alrededores y las cosas que puedes hacer.
Las habitaciones están limpias, y con baño. Lo más curioso de las habitaciones es que son temáticas, ambientadas cada una en diferentes temas (el Circo, la Edad Media, la Selva, etc). En función del tema los muebles, el color de las paredes y la decoración están ambientados de forma que no hay 2 habitaciones iguales.
Tienen pantalla plana y WiFi gratis en todas las zonas.
La ubicación es perfecta, dentro de las murallas, muy cerca de la Plaza Mayor.
Sin duda volveré a hospedarme en este sitio cuando vuelva a Montblanc.Más
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