Comida en familia buena.Nos gusto la comida pero no repetiríamos por el trato,la explicación de un camarero.
Muy protocolario con sus diferentes camareros para servir las bebidas,otro la comida,etc....algo que si no saben gestionar no vale de mucho porque cuando quieres repetir de nuevo la bebida por ejemplo te quedas hablando solo porque el camarero al que preguntas te dice que él no está para eso y que se lo avisemos a otro......
La falta de respeto es cuando pedimos un postre y lo ponen congelado (la cuchara se dobló al intentar partirlo) y cuando se lo decimos a uno de los camareros (que entendemos que sería algún jefe por la vestimenta diferente al resto) nos responde que se sirve así.
En primer lugar si se sirve helado o congelado debería de estar explicado en la carta y no es así.
No somos personas tiquismiquis ni muy exigentes,nos adaptamos a casi todo cuando disfrutamos de la comida en restaurantes pero no nos gustó para nada la respuesta, simplemente asumiendo que tenían el postre congelado y no les dió tiempo a sacarlo para que estuviera comestible nos hubiera bastado.
Como no....lo retiraron y no lo cobraron.... faltaría más......pero hay cosas que sobran y cosas que faltan....como es el RESPETO.
Gracias a dios restaurante en la isla y por la zona de igual calidad y mejor trato hay muchos.