Nosotros éramos tres familias, 6 adultos y 6 niños de distintas edades, entre 3 y 10 años. La casa resultó muy cómoda porque es grande, está limpia y está muy equipada, (menaje de cocina, ropa de casa, pequeños electrodomésticos, vajillas, cuberterías, cafeteras, lavavajillas, lavadora...) no falta de nada, la piscina fenomenal (con zona de niños pequeños) y muy limpia. La zona de jardín con mesa de piedra, bajo un árbol, ideal para comer. Delante de la casa mirando a la piscina, butacas con mesa... para tomar algo de noche. Zona muy tranquila al lado de un pazo espectacular que el dueño nos enseñó muy amablemente. Luis, el dueño, muy amable y dispuesto a ayudar. Quizás el único pero, es que es necesario llamar al dueño para localizar la casa porque no está señalizado y es difícil de encontrar aunque eso sí, el dueño, nos vino a buscar en cuanto lo llamamos. Muy recomendable. Intentaremos volver.
La verdad que mereció la pena estar en una ubicación tan buena y para poder disfrutar de un fin de semana tranquilo.
Carne exquisita y compañía estupenda. El casero muy amable y hemos podrido disfrutar de la visita del pazo de Solar do Souto.