El Hotel es maravilloso , pequeño comparado con los grandes resort del Caribe , pero eso es precisamente lo que le otorga el encanto que lo hace inolvidable . Desde que reservas hasta el día que termina tu estancia se nota la preocupación del personal .
Las habitaciones son hermosas , amplias e impecables , con refrigerador y un sistema de refill de agua purificada que evita el abuso del plástico y porque no decirlo , cuida tu bolsillo .
Los restaurantes están muy bien atendidos y ofrecen rica comida , solo el restaurante “Pega Pega “ tiene algunos problemas de organización , pero nada que no se pueda mejorar .
Para el final hemos dejado la playa que es lo mejor , porque es muy tranquila , segura y sin vendedores . La distancia entre las reposteras permite el descanso y la privacidad que se requiere. Cabe mencionar que en el hotel tampoco te molestan con ofrecimientos de membrecias y tours y lo mejor de todo no hay espectáculos ruidosos a ninguna hora .