Hola, estuvimos con mi esposa en el Marriot Grand Cayman Beach Resort en la increible playa de seven Miles, los primeros dias de junio 2012. Ante todo, les comento que viajamos muchas veces por año a distintos paises y, este hotel y esta playa con su entorno nos maravillo. Este Marriott tiene todo lo necesario para pasarla bien (restaurantes excelentes, playa, piscina, buenos cuartos, etc)), pero lo importante tambien es la atencion de sus empleados (algunos de habla hispana); comenzando por Marc Mata, que nos recibio en el front Desk con muchisima amabilidad y todos los chicos en general como Jordi Garcia, Gergana, Laura Ferreyra, Fanny Chaves, etc. La playa de un mar turquesa y calmo, tiene reposeras para todos los huespedes y en el mar hay unas plataformas para morir ahi! Casi no fuimos al centro porque estabamos muy comodos. La pileta, con vista al mar es muy disfrutable. En sintesis, no dejen de ir a Gran Cayman y no duden de ir a ese hotel. Hasta pronto.

Agradable a los 5 sentidos, personal muy amable, instalaciones comodas y funcionales, los menues de los diferentes restaurantes son exquisitos de punta a punta, en especial los miercoles de "all you can eat lobster".
La habitacion es amplia y muy comoda, de facil acceso y con una excelente vista, a pesar de no haber sido de las que miran al mar o al courtyard.
Una excelente combinacion de Playa con piscina frente al mar y jacuzzi tambien al lado de la playa.
Tan buena fue la atencion durante nuestra estadia que comence a anotar los nombres de las personas con las que mas interactuabamos para hacerles una mencion especial en este review
Ailin (muy amable al check in), Dannis (red parrot), Ivo (en la playa), Ravi (Solanas), Carlo (trabajando en todos los rincones de sol a sol, muy amable), Juliana (en la barra), Mirna (en casi todos los desayunos), Bagus (tambien en el desayuno en red parrot), Manju (hostest de los restaurantes, super cordial), Estelle (en solanas y Red Parrot), vivia (la mucama que nos dejaba la habitacion excelente a la hora de volver para dormir, muy buen trabajo realmente), no queria olvidarme de un bar tender cuyo nombre no recuerdo y no anote, lo que si me acuerdo es que es húngaro, excelentes tragos tanto en la barra del lobby como en la de la playa tambien. Una ultima pero no menos importante mencion la merece Romeo, quien es un chef que habla español y como nuestro ingles no es del todo bueno, especialmente en temas de gastronomia, salio de la cocina para recomendarnos los platos en nuestro idioma natal, un gran gesto!)