El hotel tiene una linda fachada y el lobby es lindo también. Sin embargo, el resto de instalaciones y habitaciones están un poco deterioradas con manchas en la alfombra y puertas arañadas, por dar un ejemplo. Además, el olor a humedad de las alfombras en los pasillos era un poco desagradable.
El hotel está distribuido de una forma particular, entrando el ala de la derecha tenía habitaciones de numero impar y la de la izquierda, pares. Para ir de un ala a la otra debías obligatoriamente cruzar el lobby en el nivel 2.
A su vez, el nivel 3 iba hasta la habitación 40, el nivel 2 hasta la habitación 70 y el nivel 1 hasta la última habitación del hotel.
Nadie en el hotel nos lo pudo explicar así, de hecho se molestaron por preguntar y solo nos dieron un mapa. Los ascensores tampoco tenían la información aunque se las sugerimos antes de irnos.
El servicio en general es regular. Algunas personas fueron amables y otras bastante desatendidas. Alguien del grupo pidió hielo a la habitación dos veces y nadie lo llevó. El mismo responsable del hotel era poco cortés.
Las opciones en el desayuno están ok, pero pedí una pechuga con ensalada para el almuerzo y encontré algunas hojas de lechuga muertas y la palta/aguacate negra.