Cogí una oferta muy barata por internet, y me temía lo peor, pero al llegar al hotel, todo fueron sorpresas. Por fuera no hace justicia a la calidad del interior. Todo dorado, y muy lujoso! El personal de recepción muy simpático, nos ofrecieron ayuda en cuanto al turismo sevillano; líneas de bus y metro... Nuestra habitación inmejorable. Una cama doble enooorme, TV con canal plus, baño completamente equipado, y el mobiliario superbonito. La pena es que solo estuvimos una noche, pero fue suficiente para quedarnos con un buen sabor de boca de este lugar. Lo recomiendo al 100%.
Una pena, el minibar. Suculentos productos en esa neverita, pero a precios un tanto desorbitados.... No olvidemos, que es un hotel de lujo, illo!