El apartamento está muy bien situado, tiene unas vistas muy bonitas. Se nota que es un piso antiguo al que el dueño se ha molestado en hacer una reforma que lo hace más cómodo.

Sin embargo, la estancia no se hace del todo confortable porque el equipamiento no está a la altura: faltan utensilios de cocina (sartenes muy viejas y con costra, escasa cubertería, sin mantel...); las sábanas y toallas parecen haber vivido mejores épocas.

Veníamos de haber estado en una casa rural en Asturias con todo tipo de detalles y mimo y la diferencia fue enorme.