El pasado domingo nos reunimos una serie de amigos para una celebración, y el resultado no pudo ser mejor.
Pudimos disfrutar del sol en una mesa junto a la ventana, y degustar un riquísimo arroz con bogavante a un precio muy correcto. El servicio también estuvo a la altura, cosa que tristemente se suele echar bastante en falta en la hostelería de San Sebastián.
Comentar que uno de los participantes es celiaco y que no tuvo ningún problema ya que en la carta estan especificados todos los alérgenos.
Sitio muy recomendable. Volveremos seguro, más pronto que tarde.
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