Un lugar que te recuerda a lo de antes, cuando los camareros no usaban bandeja sino que servían llevando vasos y botellas en las manos y recogían los vasos insertando uno en cada dedo.

Ves desde su terraza la llegada de los barcos al muelle. Está en la misma plaza. Cañas a 1,10€. Lo recomendaría para tomar algo. No he comido nada ahí. Eso sí, el baño sucísimo.

Nos decidimos por este lugar ya q los otros pensados estaban cerrados.....peor eleccion imposible... al entrar en la zona restaurante huele raro......nada de otro mundo el comedor.... pedimos una,ensalada mixta.... mal presentada .. los trozos de tomate gigantes etccc.... unos calamares a la romana.... que de sabor no están mal.. pero q al masticar tienes el plastico q estirass y estirassss y no se corta.....choco a la plancha... super quemado y duro..... incomible .... nooo volveremosss... no lo recomiendo a Nadie.....

Lugar sencillo con muy buenas vistas del puerto. Tranquilo y económico .Para tomar cafe o unas cañas o incluso comer algo sencillo.

Que tristese, existe gracias a los touristas que no tiene idea de comer y y solo viene una ves. Pedimos unas hamburgesas y un bocadillo americano. Primero vino el bocadillo, 15 min despues los hamburgesas con el pan quemado y negro ?? Preguntamos por que?El camarero digo: el bocadillo se prepara mas rapido???como..????? Tenia mandar las hamburquesas a la cocina de nuevo , otro 15 min mas. Faltaba ketchup, mayonesa y mostaza encima la mesa.Los camareros se pone a fumar entre el publico y las mesas??? No es por nada que por fin sanidad cerro la cocina, para reforma y limpieza. Nunca mas.