Estuvimos dos noches en los Estudios Aranzazu. Empezando por lo bueno hay que destacar q pagamos 50€ por dos noches/dos personas (entre semana) y que las habitaciones poseen cocina y frigo con lo que puedes ahorrar un poco. El resto bastante desastroso: las habitaciones piden una reforma a gritos, no están muy sucias pero están muy viejas, el baño es enano y como las paredes son finísimas oyes TODO lo que pasa alrededor. Además el ascensor es claustrofóbico y encontrar aparcamiento en los alrededores es tarea casi imposible. Si quieres ahorrar y no eres muy exigente perfecto, si no sigue buscando.

Estudios a 10 minutos.del.centro, 2 noches 66 euros, la cama muy.cómoda, ducha muy muy pequeña. Está bien si vas de paso para dormir. Son antiguos y la cocina ni la usamos, para dormir y punto.La recepción está abierta 24 horas

Nada más llegar, la recepcionista no tuvo ni el detalle de mirarnos, sólo nos pidió el DNI y nos hizo firmar unas hojas (supongo que para quedar fuera de toda responsabilidad cuando viésemos donde nos habíamos metido). Ascensor con barreras arquitectónicas (escalones y muy estrecho). El olor de los pasillos y las habitaciones era insoportable; la puerta dejaba ver todo lo que ocurría en los pasillos; mobiliario de los años 60 y sucio; menaje de la cocina que no me atreví tan siquiera a tocar; paredes con humedad que dejaban pasar todo tipo de ruidos, cables de la única lámpara colgando, ropa de la cama sucia, para entrar por la puerta del baño casi hay que agacharse, éste es estrecho y pequeño, imposible ducharse y con escasa iluminación. Hay una iglesia por lo que se oyen las misas!. En dos palabras: zulo tétrico.