Estuvimos con mi hermana un fin de semana, y el Hotel es "bueno, bonito, barato". El desayuno está en un bar a una calle abajo que está muy bien (café+ zumo+bolleria o bocadillo). La ubicación es muy buena porque está a 2 minutos de la parada Ópera, al lado del palacio Real y de la puerta del Sol y Gran Via. Puedes dejar las maletas también. Las habitaciones son antiguas, pero están limpias, que es lo que cuenta y frio no pasas, porque tienen bastante alta la calefacción. Recomendable si no se está mucho en el Hostal y se quiere una buena ubicación. El personal muy muy amable.