Un poquito más caro que los habituales de la zona pero con una muy buena calidad en sus productos y platos. Carta variada de picoteo y con tapas típicas de Cartagena. Mención especial para las papas Antonio, ¡riquísimas! A veces hacen caldero y por seis euros te ponen una ración con la que pueden comer perfectamente dos personas si lo acompañan de algún entrante. Al sentarte te ponen un pan de campo calentito con aceite y sal para chuparse los dedos. Una pareja puede comer o cenar por menos de 30 euros y salir satisfecha... Buen servicio, camareros rápidos y amables. ¡Un sitio para no fallar!
¿Es propietario o gestiona este establecimiento? Reclame su perfil de forma gratuita para responder a las opiniones, actualizar su perfil y mucho más.