Visitamos el parque natural de La Mata y luego las salinas, nos explicaron que su color indica el momento ideal para cosechar la sal. Muy interesante.
Visitamos el parque natural de La Mata y luego las salinas, nos explicaron que su color indica el momento ideal para cosechar la sal. Muy interesante.
Me encantó visitar la salina rosada de Torrevieja. El agua tiene un color rosado precioso y al entrar notas como flotas. Recomendado ir al atardecer ya que es cuando mejor se nota el color del agua y se hacen fotografías más bonitas.
¡Procurad no ir con cualquier corte o vais a ver las estrellas!
Si eres un amante de la fotografía llévate el trípode y al atardecer o amanecer tendrás unas fotos espectaculares.
Para poder disfrutar de las salinas sin mucha aglomeración se gente lo recomendable es entrar por la urbanización el Hondo y ahí hay un acceso directo.
¡Un 10!
Las Salinas de Torrevieja tienen una larga e interesante historia que conviene consultar si tienes pensado pasar unos días de vacaciones o estas de paso por por trabajo. Torrevieja es una de las ciudades que mejor ha trabajado por romper su identidad y borrar todo rasgo de una personalidad y características que la hacían única prácticamente hasta la eclosión del turismo de clase obrera que se inicio a mediados de los 80. Su desastroso plan urbanístico destrozo todo cuanto de encanto tenia y su transformación en ciudad ha sido demasiado indigesta para su historia y tradición.
LAs Salinas existen desde hace muchísimo tiempo, fueron de la Casa Real, de ahí pasaron a patrimonio del Estado, y sino me equivoco, ahora es una empresa francesa la que tiene la concesión administrativa de explotación. EL entorno de las Salinas esta sobrevivido pese al empobrecimiento de las vistas desde el parque natural de las salinas hacia fuera por una amalgama de construcciones baratas y horrendas. No obstante pasear por el parque natural de las Salinas nos transporta a otro mundo, viñas, lomas, pinares y dos lagunas alimentadas por un "acequian" que arranca de la Playa de La Mata, lugar primigenio de la antigua Torrevieja. Es un espacio de cientos de hectareas extraordinarias para hacer deporte, bici, o simplemente pasear y observar la variada e interesante fauna que allí habita, desde gran diversidad de aves hasta zorros, etc..
Pasamos una tarde muy agradable allí. Algo difícil de encontrar, pero una vez allí puedes elegir entre cubrirte completamente de barro y dejar que se seque al sol, darte un baño en la laguna donde con su alto contenido en sal se flota con mucha facilidad o hacer unas cuántas fotos al atardecer!!! Muy económico y muy recomendable!!!
El sitio es sin duda diferente, andando por un camino (por cierto lleno de excrementos de perro, lo digo por los dueños claro), llegas a la laguna rosa, siempre hay gente, normalmente rusas, paseando embadurnadas de barro. Todo es un ritual, primero coger el barro (hay que saber los sitios buenos, no donde lo coge la mayoría de la gente), después te los untas y esperas a que se seque, luego al agua unos 20 minutos mínimo, tampoco hay que pasarse pues con la densidad de la sal y el calor baja mucho la tensión. Ojo de que no entre agua a los ojos, y llevar chanclas pues la sal del fondo corta. Una vez que sales debes de llevar agua dulce para quitarte la sal, aunque hay unos pequeños manantiales de agua dulce, son insuficientes.
Pocos espacios naturales ofrecen paisajes tan extraños y espectaculares como Las Salinas de Torrevieja, el Parque Natural de las salinas de La Mata y Torrevieja, en primavera nos muestran gran variedad de aves migratorias que anidan en este paraje, en verano las salinas de Torrevieja cambian el color natural del agua del mar a un rosado maravilloso debido a un pequeño crustáceo que nace debido a la alta salinidad del agua, este color es el que muestran los flamencos al alimentarse principalmente de ellos. Los atardeceres son extraordinarios.Las visitas son libres, no apartarse de los senderos marcados para no perjudicar la flora de estos saladares.