Estuvimos en este Hotel en el puente de Diciembre. Tiene una buena ubicación: al lado de la estación de Termini(en la que tienes metro, bus y tren) y a 10 minutos andando del Colisseo. De hecho, creo que si os gusta andar, Roma es una ciudad que te la puedes recorrer paseando practicamente. En cada esquina y en cada calle encuentras vistas estupendas de la ciudad y de su ambiente. Sin embargo,la zona de Termini no nos gustó mucho: a veces se veian a personas con no muy buena pinta deambular por los alrededores y según a la hora que llegaras de vuelta podía parecer algo insegura. Aun asi, nosotros no tuvimos ningún problema.
El hotel en sí pequeño pero cómodo. Las habitaciones en general, pequeñas y con problemas de mal olor en los baños (por lo visto, y según el recepcionista,ocurre en la mayoria de los hoteles por la antiguedad del sistema de tuberias). El desayuno se servía en la segunda planta del hotel, al lado de las habitaciones ubicadas en ese piso, con fruta, dulces y pan , aunque tengo que reconocer que eché de menos una tostadora y algo más variedad. En España tendría la categoría de Hostal.
Si volviera a Roma, aunque eligiera el mismo tipo de hotel por la relación precio - ubicación, si intentaría hospedarme en otra zona que también estuviera comunicada, pero descartaría Termini definitivamente.
De Roma sólo tengo palabras de elogio, una maravilla de ciudad. Para mí, por ahora, la mejor de las que he tenido la suerte de visitar.