Durante mi estadía me sentí como en casa.
El departamento es amplio y cómodo, está bien equipado y decorado. Hasta hubo un día de mi visita que opté por quedarme ahí.
Lidy es muy atenta y te recibe con gestos y elementos de cortesía inesperados.
El barrio es un monumento arquitectónico, por lo que te sentís habitando una Amsterdam ideal por estereotípico.
Ya lo recomendé con total confianza a mis amigos y familia, y por mi parte volvería sin dudarlo.