Lo mejor del hotel es la ubicacion y precio. Las habitaciones son correctas y limpias y el desayuno suficiente aunque con poca variedad. Las habitaciones al lado de recepción son algo ruidosas ya que se escucha el telefono o cada vez que algun cliente accede a ella para pedir la llave. Intentar evitarlas.

Lo mejor del hotel es la situación, esta en la mitad de la Avenida Liberdade. Una avenida arbolada y preciosa donde estan ubicadas las tiendas de marca, resulta muy gratificante la vista desde la habitación y aunque es una avenida donde pasan coches, la zona es muy tranquila. Esta muy cerca de Pl. Restauradores y tiene la parada de metro Avenida a unos metros, tambien paradas de bus muy cerca, pero se puede ir andando a cualquier parte del centro. La habitacion grande, comoda y limpia aunque el baño es un poco pequeño pero bien. El desayuno bufet correcto, basicamente lo de todos los hoteles. El personal agradable.
La entrada es por un portal grande y en el 2º piso esta la recepcion y las habitaciones en el 2º y 3º, tiene ascensor y es muy tranquilo.
Los contra: la cama es un poco corta para los altos, la caja fuerte que hay en el armario es de pago y el wii-fi tambien.
En definitiva nos gustó mucho el hotel y la ubicación, cuando vuelva a Lisboa reservaré en el mismo hotel porque esta francamente bien, en comparación con otros que vimos durante nuestra estancia.