Fui con mi pareja el primer fin de semana de agosto porque queríamos desconectar un poco del bullicio de la ciudad y con solo una noche de estancia vinimos completamente renovados. Es una casa tranquila y decorada con mucho gusto. Dori y Oscar te tratan como si te conocieran de toda la vida y hacen que te sientas como en familia. Si necesitas algo de orientación sobre que hacer por la zona solo tienes que preguntarles, a nosotros nos recomendaron una rutilla para caminar y conocer un poco el entorno del rio Pirón y un pantano cercano a la Granja para darnos un baño.
La comida es casera, rica y sobre todo sana. Por la noche nos invitaron a unirnos a una cena en grupo con sus amigos y otros huéspedes en el porche donde pudimos disfrutar de una agradable tertulia al aire libre.
Lo recomendaríamos y repitiríamos sin duda alguna ;):)
Sí queréis pasar una o varias noches para conocer algo de Segovia, podéis alojaros en esta casa rural excelente, con ambientación antigua sin perder confort, con vistas muy bonitas, muy cercana al la capital de la provincia, con unos dueños que se ocuparán y esmemarán en hacerte la estancia agradable, con una comida sana .
Muchas gracias Dóri,Oscar y su hija!
Estuvimos una noche en esta casa rural para visitar Segovia capital (a unos 20 minutos en coche).
La propietaria es una mujer maravillosamente simpática y conversadora.
La casa rural está cuidadosamente decorada, con habitaciones amplias y bien equipadas. Por fuera, la fachada es muy bonita.
Los desayunos que preparan son exquisitos, recomiendo probar sus mermeladas, las cuales también vende.
Hemos pasado un fin de semana toda la familia ocupando las 4 habitaciones de la casa rural y hemos quedado encantados, estuvimos como en casa.
Dori y Óscar son unos anfitriones encantadores y se esmeran en que todo esté a gusto de los invitados. La casa está limpia y cuidado hasta el último detalle, las habitaciones calentitas e incluso nos dejaron un radiador eléctrico por si queríamos más calor para un bebé que tenemos.
Tanto los desayunos como las cenas espectaculares. Comida casera y riquísima.
Hemos pasado unas sobremesas realmente agradables al calor de la chimenea del comedor.
Está situada a menos de media hora de Segovia.
Todo un acierto, amabilidad, confort y buen gusto. Repetiría sin dudar
Decidimos hospedarnos aqui ya que estábamos por esa zona de turismo. Muy cerca de Segovia y de más pueblos con muchisimos lugares para ver. El pueblo es un lugar muy tranquilo y acojedor. El trato en la casa rural ha sido excelente, se come genial: desayunos con mermelada casera de diferentes sabores, magdalenas también caseras... La habitación muy acogedora y bonita, y la dueña muy amable. Si tienen alguna duda sobre qué visitar en esa zona no dudéis en preguntarla y os aconsejará sobre qué sitios merece la pena. El único inconveniente es que crujía mucho la madera del suelo, pero por lo demás todo perfecto.