La experiencia de contemplar una gran colección de pintura abstracta- contemporánea comentada por el propio autor es excepcional , además lo hace con entusiasmo y generosidad, el propio edificio restaurado para contener la colección merece también la pena ,este tipo de iniciativas dan valor a estos pueblos y animan a visitarlos , respecto a la obra pictórica de Ricardo Pecharroman ( sin ser un experto ) me parece de un raro talento artístico , conocer además la obra en su contexto temporal Y personal añade valor a la visita . El contraste de una obra moderna con muebles antiguos y en un espacio “ cuasi medieval” le da un sabor único.
Es también de agradecer la disponibilidad para mostrar el Museo, cuando en muchos pueblos es difícil cuando no imposible visitar monumentos u obras de gran valor porque nadie los enseña o están cerrados a cal y canto ( pagar 5 € por la visita me parece muy adecuado) aunque para jóvenes debería ser de 3€ , así como las láminas de algunas obras cuyo precio es excesivo -20€-

Ha sido una maravillosa y enriquecedora experiencia poder conocer las pinturas neoexpresionistas del señor Pecharromán y de Agustín Decórdoba. El propio Pecharromán nos mostró su obra y nos contó anécdotas bastante interesantes y curiosas, con una actitud cercana y muy amable. La casa-museo tiene verdaderas reliquias mobiliarias de la época de los Reyes Católicos y un tapiz de valor incalculable. Además, posee una colección espléndida dedicada a Carlos V y El Quijote, entre otras muchas. Lo visité el día de mi cumpleaños y para mí fue uno de los mejores regalos. Merece la pena verlo.

También pediría un poco de respeto para la fundación. No hay fraude alguno y puedo asegurar que está recogida legalmente en el BOE, junto con el valor económico que alberga. Las obras pueden gustar más o menos, al igual que sus creadores, pero creo que hay que transmitir, por encima de todo, un respeto a la cultura y a los artistas que viven de ella. No hace falta denigrar, insultar o menospreciar el trabajo de las personas.

Un saludo.