La casa rural Ezkilenea es un alojamiento fantástico, sitiuada al norte de Navarra, a los pies de la Sierra de Aralar, un paraje extraordinario, el pueblo de Lekunberri está muy bien comunicado por autovía tanto con San Sebastián como con Pamplona, la casa disponde de todo lujo de detalles con una decoración preciosa y super limpia, sin dudarlo lo mejor de la casa son sus dueños, una familia encantadora dispuestos a ayudarte a que tu estancia sea lo más agradable, desde aquí agradecer a Oier y Raquel su dedicación y atención durante estos dias maravillosos que hemos pasado en vuestra tierra .
La verdad que han sido unos días fantásticos, tanto por la casa como por el entorno, la primera cabe desatacar el buen gusto, la comodidad y la tranquilidad que transmite, todo ordenado y limpio, las camadas comodísimas y las estancias espaciosas, mención especial a la planta baja con una zona de juegos ideal para los niños y referente a la zona que decir...cerca de Pamplona y cerca de San sebastián..
Para volver seguro..
Un saludo.
Excelente casa, más bien piso pero con habitaciones gandes y baños espaciosos. En el centro del pueblo y a un paso de cualquier sitio. El entorno es maravilloso. En el pueblo no hay nada que se encuentre a faltar. Por lo que respecta a los anfitriones siempre atentos a cualquier circustancia. Fuimos tres personas y tres perros y estuviemos mejor que en casa. Totalmente recomendable.
Preciosa casa que ha superado con creces nuestras expectativas, cómoda, amplia, limpia. En un entorno espectacular que da lugar a conocer un montón de parajes maravillosos. Los anfitriones muy amables y simpáticos, dispuestos a facilitarte cualquier tipo de información. Totalmente recomendable.
Una casa muy bien situada para visitar el pais Vasco y navarra, con todos los servicios necesarios. Los anfitriones, faltan palabras: amables, serviciales, simpáticos, etc.. facilitan todo lo que está en su mano para que tu estancia sea de 10. Un abrazo a Oier, Raquel y familia, si tenemos la posibilidad de volver repetiremos en vuestra casa sin duda, y si algún día os animáis a venir al sur, aquí os esperamos. Un abrazo