Cuando se combina la calidad de los alimentos y la buena elaboración en la cocina nada puede fallar; si además de su amabilidad, su atención y su conocimiento en aceites, vino y resto de productos que ofrece el propietario y su mujer, una cocinera excelente, te ofrece una proximidad tan calurosa pues está claro que la comida se convierte en una experiencia que no vas a olvidar en mucho tiempo. Repetiremos sin lugar a dudas!

Un bar de pueblo incómodo y ruidoso donde se come excelentemente . Los dueños muy amables y excelentes profesionales , con productos excelentes de proximidad sabiendo cocinarles .
Los escabeches , los asados , los revueltos ..... todo de 10.
Las peras al vino y los yogures de Armuña también de 10.
Hay que reservar por la pequeña capacidad .

Comida de siempre bien cocinada . Buen producto . Un bar familiar con un servicio amable y correcto . Hay que reservar .

Muy buena comida y vinos, el dueño asesora a los comensales. Especialidad:escabeches. Recomendable reservar ya que el restaurante es pequeño.

Parros (pato) al horno en su punto y con un potente y autentico sabor, escabeches de palometa, de solomillo de pavo...sencillamente excelsos, esplendido bacalao en tempura, revuelto de calabacin delicado de sabor y con huevos "de verdad", exquisitos postres caseros, una amplisima variedad de estupendos vinos y un trato por parte de Santi, Casilda y todo el equipo que por si solo ya justificaria la visita. Y como guinda del pastel un precio sencillamente imbatible.
Se puede pedir mas?
Simplemente una casa de comidas de 10.