Como anfitriona Ángeles es encantadora y muy detallista.
La vivienda es muy comoda para descansar y esta muy cerca de la playa, con la terracita de alante y el patio de atrás puedes tomarte tu aperitivo cubierto del sol a cualquier hora y como esta metido te da bastante intimidad lo que todavía lo hace más apacible ya que Calabardina es muy, muy tranquilo. El patio de atrás es muy acogedor y cómodo para endulzar los equipos de buceo o los cachiperres de la playa con una ducha que da muchisimo juego.
Muy recomendable para pasar unos días y sentirte muy agusto.
Sin duda volveremos.
La casa muy acogedora y familiar, un lugar idóneo para descansar y tomar el sol, a pocos metros de la playa. Calabardina un descubrimiento. Cabo Cope y su litoral de playas vírgenes tranquilas. Clima excepcional. Muy recomendable.