Nos alojamos de viernes a domingo, el hotel está muy bien situado, en pleno centro, enfrente de la plaza de toros, la oficina de turismo y el tajo. Rodeado por callecitas con un montón de bares donde comer. El hotel es tranquilo, las habitaciones amplias, bonitas y bien equipadas. La televisión espectacular, será de 42" o así, minibar, y a nosotros nos tocaron vistas a la plaza de toros. Eché de menos que hubiera calefacción en el baño porque pasé un poco de frío al ducharme pero bueno, en general ha sido una buena experiencia y lo recomiendo totalmente. No puedo opinar del restaurante porque nosotros solo contratamos alojamiento. El personal es amable y los caramelos de recepción muy ricos jeje.