Casi pegado a la Medina, se trata de un hotel con muebles antiguos y encantadores. El personal más que agradable, el desayuno frugal pero delicioso y wifi gratuito en el lobby. La habitación (doble con baño privado) muy limpia y amplia, con un balcón. No es de lo más económico, pero tampoco es caro (alrededor de u$s 30). Si volviera a Túnez alguna vez, sin duda volvería a elegir este hotel.
- Wifi gratuito
- Restaurante
- Servicio de habitaciones
- Bar/Salón