El hotel espléndido. La habitación enorme y comoda. Mucho silencio, ideal para descansar, La atención del personal destacable con muy buena disposición siempre. Lo único que noté como un detalle es el colchón de la cama algo deformado pero no me impidió descansar. Fuimos un fin de semana muy frío por lo que no fue posible disfrutar de la piscina exterior ni el hermoso jardín. No usamos la piscina interior, si el gimnasio que tiene 4 o 5 aparatos básicos.
El restaurante del hotel muy bien. Buen desayuno (solicitamos leche vegetal y atendieron nuestro pedido sin problema)