Este es un hotel caro pero vale cada centavo que se paga. Las instalaciones son absolutamente increibles y ni hablar del servicio, simplemente espectacular. Cada persona del staff del hotel esta siempre pendiente de cualquier cosa que uno pueda necesitar y siempre lo reciben a uno con una sonrisa. Auqnue esta un poco alejado del pueblo, siempre hay tuk tuk's o carros que lo acercan a uno al pueblo. Siem reap es un paraiso y este hotel es el lugar perfecto para, despues de un dia de intenso calor visitando templos, llegar y relajarse al lado de la piscina, o tomar una ducha y una siesta en una habitacion perfectamente condicionada hasta para el huesped mas exigente.
100% recomendadoMás
- Wifi gratuito
- Parking gratis