Hotel muy bonito y cuidado. Cómodo, seguro y extremadamente limpio. Rodeado de restaurantes, tiendas y lugares de interés turístico. Se puede ir caminando a todas partes. La ubicación ideal para recorrer Cartagena. Muy buen desayuno y un restaurante agradable y con sabrosos platos de la cocina peruana. Pero sin dudas lo mejor de todo es su personal. Agradable, cortés, pendiente de las necesidades del cliente. Un agradecimiento especial a la gerente Rossana por su interés en que tuviéramos una estancia inolvidable. A Brian y Sixto, de Recepción, a su jefe Luis, dedicado y preocupado. Al eficiente y amable Fabián, a Daniella, Wendy. En fin, a todos nuestro agradecimiento enorme.