Fue nuestro "campamento base" para la visita del amanecer en el monte Bromo y la verdad es que no disfrutamos mucho del hotel (salimos al 01:30 A.M) Lo único que puedo decir es habitaciones aceptables con cama cómoda, y en nuestro caso tranquila, nos dió tiempo a dormir un rato, baño normal, con bañera y toallas grades, amenities como en el resto, escasas como si fueran para una persona, (sobre todo en lo que se refiere a gel y champu) con cepillos de dientes cosa que se agradece, cena en el hotel, aceptable, a base de carne y sopa.
Atención perfecta en todo momento, tanto en restaurante como en recepción (piden VISA para señal). A la salida nos dieron un desayuno "para llevar" muy razonable con zumo fruta, huevo duro, bollos y agua.