Hemos estado el fin de semana.
La habitación ( 106 ) está genial. Muy amplia y limpia. El baño también muy bien. Pero tiene 3 cristaleras desde el ras del suelo hasta el techo, que dan hacia la calle, por lo que se oye absolutamente todo lo que se habla fuera...., siendo zona de paso de gente.... Afortunadamente el fin de semana que estuvimos fué tranquilito, pero había niños jugando....y siempre pasa gente hablando.
Los recepcionistas del hotel muy simpáticos los 3 con los que coincidimos.
Pedimos una media pensión, el desayuno continental cuesta 6.50 y lleva un zumo de naranja natural, medio bocata de jamón, queso, tortilla....., un café y un pedazo de bizcocho. ( no está mal, quizá un poco caro....).
Se come bien, pero la bebida no entra en la media pensión.....El primer día tomamos una cerveza (2.90) nos recomendaron un vino(30), que estaba muy bien, pero era un crianza, y en la cuenta intentaron cobrarnos un reserva. El café 2.10, un cubata 5.80. Por lo tanto un sablazo de miedo. Cualquier refresco 2.90.
Creo que deberían hacer un precio un poco especial a la gente que está en el hotel que les asegura gente cada día.....
La verdad es