A raíz de la erupción del volcán Puyehue, perdimos una noche de las ya pautadas en el Charming, 21 horas de ómnibus y cansancio se diluyeron al bajarnos del taxí. Ya nos esperaba Diego y llamándonos por nuestro apellido nos invitó a la recepción ofreciéndonos una copa de vino para relajarnos, nos dijo que Villa Catedral estaba a nuestra disposición de inmediato y que ya el personal estaba llevando nuestro equipaje. Alberto, el dueño, nos ofreció un micro-tour de nuestro apartamento y sus bondades, habitación principal con cama king, duvet de plumas, calefacción en el piso, mueble de doble lavamanos, wc y bidet privados, sauna, ducha corporal con aroma-croma-terapia, una inmensa bañera- yacuzzi, bar equipadísimo y la más espectacular vista del Lago Nahuel-Huapi. La otra habitación con una cama queen y una individual perfecta para la familia, baño completo incluyendo ducha-bañera-yacuzzi y wc privado; cocina totalmente equipada comedor para cuatro personas y una pequeña buhardilla para los niños. Los desayunos-buffet son fantásticos, jamás estuvo ni el café ni la leche fría para el mismo y contaban con todo lo que se nos pudiera ocurrir para comer. Las cenas, una delicia gastronómica con un menú personalísimo y apropiado al entorno. Por ser temporada invernal no pudimos disfrutar de sus instalaciones exteriores como piscina climatizada, playa del lago, etc. ...,mucho frío para nosotros los caribeños. Necesitabamos un auto de alquiler y Diego nos consiguió uno de inmediato y nos los hiza llegar...A raíz de la erupción del volcán Puyehue, perdimos una noche de las ya pautadas en el Charming, 21 horas de ómnibus y cansancio se diluyeron al bajarnos del taxí. Ya nos esperaba Diego y llamándonos por nuestro apellido nos invitó a la recepción ofreciéndonos una copa de vino para relajarnos, nos dijo que Villa Catedral estaba a nuestra disposición de inmediato y que ya el personal estaba llevando nuestro equipaje. Alberto, el dueño, nos ofreció un micro-tour de nuestro apartamento y sus bondades, habitación principal con cama king, duvet de plumas, calefacción en el piso, mueble de doble lavamanos, wc y bidet privados, sauna, ducha corporal con aroma-croma-terapia, una inmensa bañera- yacuzzi, bar equipadísimo y la más espectacular vista del Lago Nahuel-Huapi. La otra habitación con una cama queen y una individual perfecta para la familia, baño completo incluyendo ducha-bañera-yacuzzi y wc privado; cocina totalmente equipada comedor para cuatro personas y una pequeña buhardilla para los niños. Los desayunos-buffet son fantásticos, jamás estuvo ni el café ni la leche fría para el mismo y contaban con todo lo que se nos pudiera ocurrir para comer. Las cenas, una delicia gastronómica con un menú personalísimo y apropiado al entorno. Por ser temporada invernal no pudimos disfrutar de sus instalaciones exteriores como piscina climatizada, playa del lago, etc. ...,mucho frío para nosotros los caribeños. Necesitabamos un auto de alquiler y Diego nos consiguió uno de inmediato y nos los hiza llegar al restaurant donde estabamos almorzando...., mejor imposible. Su ubicación equidistante tanto del cerro Catedral ( estación de sky ) como del centro de la ciudad lo hizo perfecto para nuestra estadía. En fin resulta ser un sitio especialísimo cuyos adjetivos propios serían exclusivo y exquisito. Gracias Alberto...., nos vemos prontoMás
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