Viajamos 4 familias con un total de 21 personas. Fue una semana maravillosa, la calidad de las instalaciones, los restoranes, las habitaciones, la atención de todos los empleados, la calidad de la comida, los licores, etc., todo de lo mejor. Las habitaciones familiares son espectaculares. Muy cómodas, limpias y bien diseñadas. Los restoranes con reserva obligan a entrar con vestimenta formal, lo que genera un grato ambiente y formalidad. El sistema de reserva no funciona bien para grandes grupos, hay q tener paciencia. En todos tuvimos atraso. Tiene un teatro que se lo quisieran muchas ciudades. Cuenta con muchas tiendas cuyos precios, en ocasiones, son más convenientes que fuera. Las piscinas exquisitas, la playa genial, los equipos de playa (catamarán, windsurf, etc.) muy buenos. Como dicen los empleados "el único problema, es que no hay problema". La piscina con olas fue un imán para todos los niños. La calidad de la comida de los distintos restoranes es impresionantemente buena, hay todo lo que uno se pueda imaginar. LO MALO: el precio de las fotos que uno se puede sacar con distintos animales son excesivamente caras. No respetaron la solicitud de habitaciones cercanas. El horario de la reserva de restoranes no siempre se respetó.
Lejos el mejor hotel que he estado. Volvería feliz.