La atención fue muy buena, el desayuno fue excelente, las vista muy linda pero la habitación era fría, no estaba bien limpia y lo que nos sorprendió es que sin mas a la noche nos dejaron solos ya que eramos los únicos alojados y no dejaron a nadie a cargo, nos dieron las llaves, un numero de telefono para urgencias y adios... no dormi muy tranquila, nos agarro tan desprevenidos que ni atinamos a exigir que hubiera alguien. Me pareció muy desprolijo e irresponsable.

Cuando decides pagar el precio del hotel, esperar que la calidad sea máxima, en especial por ser precios cercanos a hoteles 5 estrella, pero nos tocaron defectos que bajan su calidad como: cortinas sucias, tabla del balcón rota, mineral de la pieza abierta, jabón ya usado en el baño, falta de confort extra en baño, ventanas sucias, lentitud del servicio en cafeteria, en el desayuno el café tibio. Mi sugerencia para el hotel, es que hagan de la experiencia de alojar en un palafito una experiencia boutique, por el precio que uno paga esperaria una cortecia de bienvenida, un café que fuese, incorporar en los productos del hotel y habitación productos nativos (jabon chilote, piecera de lana, cortecia en la habitación con infusión de la zona, etc), además de un buen estandar en las habitaciones, incluyendo en ello privacidad, a modo de ejemplo, la primera noche nos toco en el 2do piso del palafito con vista hacia el mar, pero desde la terraza de la pieza de abajo se podia ver todo hacia arriba, no siendo comodo estar alli, ya que habia gente abajo.

En resumen si comparo estos precios con un hotel 5 estrella u otro hotel boutique, creo que el precio es excesivo.

Si bien el lugar es muy bonito decorado en forma original y el personal es muy amable; tienen que solucionar varios items para mejorar su puntuación: fundamental la aislación de las habitaciones (se escucha todo), la calidad de las camas y una mejor conexión de internet,