Ubicado a unas cuadras de la playa, se escucha el mar. Es una gran casona con varias habitaciones y muy acogedor. El desayuno delicioso y la gente muy amable. El único detalles es que no hay camas separadas, todas las habitaciones tienen cama de dos plazas, por lo tanto es muy recomendable para parejas.

Fui en una oportunidad con mi esposa. Es como una casa ambientada como hotel boutique, no tiene muchas habitaciones pero es realmente bello. Cerca del mar y del centro. El desayuno es casero y muy bueno. El auto se estaciona em la calle sin problemas.

Estuvimos alojados en Julio de 2013. Lo elegimos por la relación precio-calidad y opiniones de viajeros y no nos desilusiono. La casa es maravillosa, finamente decorada, cálida y acogedora. Todos los detalles están pensados para que que puedas descansar. Nuestra habitación la 11( nos dijeron que era de las mas lindas) tenia vista al mar y podías escucharlo, de noche dejabamos entreabierta la ventana para escuchar el mar. La cama muy confortable y amplia, el baño excelente. Tenia un living donde podías leer y un vestidor pequeño que esta muy bueno porque cuando viajas es bueno tener un espacio donde guardar todo. El desayuno exquisito. Por la tarde tenias cookies y jerez. Y cafe en la cocina durante todo el día. La música clásica ambientaba y ayudaba a relajarte. No hay TV en la pieza lo que se agradece si uno esta en plan de descanso. Tiene estacionamiento en un costado del hotel y en la calle, sin problemas.
Fueron los mejores dias de nuestra visita por la costa oeste californiana. Carmel es un sueño y Sandpiper esta a su altura.Este lugar nos encanto, lo recomendamos sin duda alguna!!!