Viajamos en familiar con un niño de 4 años, el trato de Mia, la responsable del hotel de 10 tanto con el niño como con nosotros! La habitación perfecta con una cama enorme para los 3.
Una mención aparte merece tanto la comida como el desayuno, un 10, tanto por lo rica que estaba como por lo económico!
Repetiríamos sin dudarlo.
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El hotel está tocando la muralla sur de la ciudad antigua. Uno de los pocos sitios tranquilos que quedan en Pingyao (al menos en Agosto). Las habitaciones están distribuidas alrededor de un jardin precioso y tranquilo en el que puedes comer o tomar algo. Ambiente muy tranquilo y acogedor. Muy amables y con ganas de ayudarte en lo que necesites.
Muy recomendable
Hotel chulilisimo, muy auténtico.
Las chicas que nos atendieron fueron encantadoras,y nos ayudaron con todo
Nos dejaron bicis de forma gratuita
Las habitaciones geniales
Desayuno estupendo en ese patio tan espectacular.
Mai la chica de la recepción un encanto y nos ayudó mucho, hasta antes de llegar me ayudó sobre dudas por email en el viaje. Céntrico, tranquilo, limpio. El desayuno que pagamos estaba buenísimo y emgran cantidad. Nos orientó para cenar por la calle principal y buenísimo y baratisimo, no tenemos queja alguna.
Trato especial, te hacen sentir como en casa. Son encantadores. La comida está muy buena y baratísima . El hotel es muy bonito y las habitaciones también están muy bien. Sin duda lo recomendamos al 100%. La relación calidad-precio de este hotel es inmejorable.
Hotel auténtico, si quieres dormir en una casa con cama kam gigante y limpia, el personal muy agradable, hablan inglés, nos recogieron y llevaron a la estación de trenes a muy buen precio. Muy cerca del centro pero en una calle tranquila. La verdad que tanto el pueblo como el hotel te trasladan a la china antigua. Los patios y jardines son preciosos.
