Horrible experiencia, era la segunda vez que íbamos y ha sido terrible.
Teníamos una reserva para 13 personas a las 14. 30h, después de bastantr tiempo esperando en las mesas exteriores a pleno sol, comenzaron a tomarnos nota y traernos algo de beber.
Habíamos pedido entrantes que llegaban poco a poco y con muchísimo tiempo de espera entre los platos. Hacia las 16.30h empezaban a sacar los platos principales, primero un par de pizzas para los niños y una especie de hamburguesa (digo esto porque ers sólo un poco de carne pequeña con una rebanada de pan tostado, que debió de darles vergüenza y nos dijeron si queríamos unas patatas, patatas fritas de bolsa para que luego digan que no tienen productos industriales). El resto de platos principales comenzaron poco a poco a decirnos que no tenían y tuvimos que ir cambiando, seguían saliendo de uno en uno. No entendemos como doa horas antes no habían leído la comanda y nos habían informado de lo que tenían o no.
Los platos eran cada vez más pequeños y con menos productos. A las 17.30h nos informaros que los dos últimos platos que habían pedido dos comensales que quedaban por comer no los tenían, que pidiesen otra cosa, así que decidimos ya irnos.
El dueño quién estaba al frente de la cocina, no tuvo la vergüenza de salir a darnos una explicación y mandó a una avergonzada camarera a informarnos.
La cuenta teniendo en cuenta las horas que estuvimos, el desastre de platos, mal cocinados y con poca calidad y cantidad, bebidas calientes y sentados a pleno sol ascendió a 300 euros.
Una experiencia nefasta, no recomendable.
¿Es propietario o gestiona este establecimiento? Reclame su perfil de forma gratuita para responder a las opiniones, actualizar su perfil y mucho más.