No es fácil encontrar un alojamiento para 11 adultos y 5 niños. Esta casa rural cumplió nuestras expectativas, a un precio bastante razonable. Está situada en un barrio tranquilo de Almagro, con aparcamiento en la puerta. La mejor habitación es la de la planta baja, con un cuarto de baño externo, que sirve para el resto de alojados. En la primera planta dispusimos de 4 habitacaiones amplias y con camas supletorias para los niños. El único problema es que solo cuenta con un cuarto de baño para toda la planta. Lo más original es la buhardilla, con un amplio espacio con 2 camas y otro apartado con otra cama, y para todos, un solo cuarto de baño. La escaseza de cuartos de baños es la única "pega" que pondríamos a una estancia que se desarrolló de maravilla. Todos cupimos en el salón comedor, lleno de libros para adultos y para niños. Bonifacio, el propietario, nos atendió estupendamente y se le agradece que preparara la casa para las fiestas navideñas, con su árbol y sus adornos por todo el salón. Nos sorprendió muy gratamente el patio interior porticado. ¡Es genial! A pesar del frío y gracias al toldo que permite cubrir el hueco, disfrutamos todos en él con un karaoke espectacular. Recomendamos encarecidamente esta casa rural; no van a salir defraudados.
Casa rural muy amplia y con todo lo necesario. Estuvimos varios matrimonios con niños y no se echó de menos nada (espacio, limpieza, etc). Completa en todos los sentidos.
Facilidades e información por parte del dueño.
Excelente casa para un fin de semana con mucha gente. Si hace buen tiempo el patio es estupendo. Cocina muy amplia y dormitorios espaciosos. Todo en perfecto estado de limpieza y mantenimiento
Estupendo alojamiento, con ropa de cama y toallas de excelente calidad. Las habitaciones amplias, limpias y confortables. Las recomendaciones del propietario nos han servido de mucho para conocer Almagro, repetiremos en verano.
Está al lado de parques infantiles y un campo de fútbol, lo que fue ideal para mis sobrinos. Las habitaciones son grandes y cómodas; y el patio, donde desayunábamos, una pasada. ¡¡Volveremos en verano!!