Cabe destacar que este restaurante tiene dos zonas, menú diario en polígono industrial digno y nada más, y zona de carta. Dónde acudo asiduamente desde que trabajo en esa zona. El salón es bonito, moderno, espacio entre mesas, y el servicio es excelente, la carta completa y siempre tiene sugerencias, creo que todas las entradas que he probado están francamente buenas, raciones cumplidas con materia prima de calidad, de los segundos me quedo con los pescados, el rodaballo y el lenguado...los bordan. Precio...no lo regalan, pero comes muy bien por unos 40€ algo que en Madrid no bajaria de 50€. Muy recomendable sin dudarlo.