Es indudable que en este hotel se come genial, el personal es muy eficiente y la calidad del sueño es óptima. Un hotel lujoso y a pocos minutos caminando hacia la pequeña cala marina con espectaculares vistas de barrancos y cortados. Una pega muy pega. Los equipos de aire acondicionado son muy antiguos y ruidosos. Si se apagan te asas, si los pones, el motor vibra y molesta a los huéspedes. Por tanto, toca mejorar ese aspecto.