Son unos apartamentos muy básicos donde no parar mucho tiempo, solo para dormir, no se puede cocinar nada allí. El buffet básico pero correcto. Lleno de familias alemanas, inglesas, holandesas, .... El ambiente muy tranquilo y silencioso. La limpieza escasa. Lo peor fue que nos robaron dos bañadores de mi marido dos días consecutivos del tendedero del apartamento que esta dentro del complejo del hotel. A algún extranjero le moló la moda española ( desigual, etc) pero desde la dirección no dieron ninguna explicación. Me robaron los bañadores dentro del recinto del hotel, de noche y con alevosía ( dos veces, dos bañadores, dos días consecutivos). Imperdonable no ofrecer ninguna explicación o compensación. Tienen que mejorar la seguridad del hotel y su amabilidad en el trato.

No hay animación para ninos tampoco.

Cala dor es una maravilla y con todos los servicios. Se puede ir andando a todas partes y bañarse en las cuatro o cinco calas de cala dor.

También hay autobuses públicos para ir al Parque del mondragó que esta cerca y es un área natural sin casi urbanizar con cala mondragó y pequeñas calas de ensueño.

Yo recomiendo alquilar un coche y recorrer la isla. Es una joya y tienes todos los servicios. Yo volveré en invierno en cuanto pueda.Más