El hotel es nuevo, se inauguró en 2018. Muy limpio, super cómodo, moderno, rápido check-in y check-out, sin costes adicionales ni tasas ocultas. El WIFI funciona genial, las habitaciones están equipadas con todo, hasta un adaptador para el enchufe cosa que se agradece muchísimo. La cama King size (2x2) super cómoda, dormimos genial está muy bien insonorizado, el baño muy moderno y limpio. Te dejan todo tipo de amenities.
El personal en general muy agradable, gente joven.
Comento que la ubicación es mejorable porque en la puerta normalmente siempre hay homeless, cosa que el hotel no tiene nada que ver, pero por las noches no ayudan a transmitir imagen de seguridad. Pero no es una zona insegura, hay mucha gente por la calle y está cerca la estación del metro que te lleva en un momento al centro y a cualquier parte de Manhattan.
Está colindante al barrio chino pero para los que nunca han estado en NY, no os dejéis engañar el barrio chino es seguro y la comunidad asiática es amable, no se mete con nadie por lo que es buena zona para hospedarse.
A 2 minutos a pie está ubicada la pizzería más emblemática y antigua de NY, Lombardis. Muy típica de visitar por los turistas y está al ladito del hotel.
Hay restaurantes alrededor pero no son baratos (para mi que soy de España no lo eran), no hay cadenas cerca tipo Hot-Dog, McDonalds etc.
Este mismo hotel situado en pleno centro costaría el doble, para mí es de 5 estrellas y si vuelvo a Nueva York repetiré hotel porque prefiero tomar unas paradas de metro que hospedarme en hoteles del mismo precio pero cutres por estar en Times Square. Pero eso ya es personal, hay quien prefiere alojarse en el centro aunque el hotel no sea muy bueno.