Este año decidimos hacer algo diferente, no irnos a Grecia, y nos fuimos de escapada a la montaña. La semana anterior la previsión del tiempo en Zell era mala así que andábamos bastante nervioso pensando si habíamos acertado con nuestra decisión. La cosa fue a peor cuando leímos las críticas de un grupo de esquiadores escoceses. Llegamos el sábado pasado bajo la lluvia, la agencia del viaje no funcionó bien (Tui normalmente es muy buena)haciéndonos esperar bajo la lluvía a unos pasajeros que no aparecían (ni el avión). La habitación del hotel See resultó ser excelente, con vistas al lago, muy limpia y ordenada, grande. El personal fue muy agradable. El personal del restaurante fue muy atento y educado... se desvivían por nosotros. La comida fue realmente buena pero limitada. En el desayuno elegías entre 3 opciones posibles para la cena. Si eres quisquilloso con la comida, come en otro sitio. El clima fue variado, 3 días a 15ºC y lloviznando y 3 días por encima de los 27ºC. Los días que hizo bueno fuimos a escalar por las montañas. Visitamos las cataratas Kimmel yendo en autobús y tren, ve con botas para andar pues el camino está por encima de los 458 m y es bastante empinado aunque el esfuerzo merece la pena. Ve en góndolas por detrás de Zell y bajo Kaplun, unas vistas increíbles. Usa autobuses locales. Visita las majestuosas cataratas que hay sobre Kaprun, solo cuesta...Este año decidimos hacer algo diferente, no irnos a Grecia, y nos fuimos de escapada a la montaña. La semana anterior la previsión del tiempo en Zell era mala así que andábamos bastante nervioso pensando si habíamos acertado con nuestra decisión. La cosa fue a peor cuando leímos las críticas de un grupo de esquiadores escoceses. Llegamos el sábado pasado bajo la lluvia, la agencia del viaje no funcionó bien (Tui normalmente es muy buena)haciéndonos esperar bajo la lluvía a unos pasajeros que no aparecían (ni el avión). La habitación del hotel See resultó ser excelente, con vistas al lago, muy limpia y ordenada, grande. El personal fue muy agradable. El personal del restaurante fue muy atento y educado... se desvivían por nosotros.

La comida fue realmente buena pero limitada. En el desayuno elegías entre 3 opciones posibles para la cena. Si eres quisquilloso con la comida, come en otro sitio.

El clima fue variado, 3 días a 15ºC y lloviznando y 3 días por encima de los 27ºC.

Los días que hizo bueno fuimos a escalar por las montañas. Visitamos las cataratas Kimmel yendo en autobús y tren, ve con botas para andar pues el camino está por encima de los 458 m y es bastante empinado aunque el esfuerzo merece la pena. Ve en góndolas por detrás de Zell y bajo Kaplun, unas vistas increíbles. Usa autobuses locales. Visita las majestuosas cataratas que hay sobre Kaprun, solo cuesta 3 euros y son espectaculares. Come o tomate una copa en Crazy Daisy´s que, a pesar de su nombre, es el mejor sitio nocturno para tomar tranquilamente una copa y escuchar las actuaciones. No hace falta que cuentes que la compañía de viajes,no merece la pena el mogollón, fíate de los autobuses y trenes y viaja por tu cuenta. Cuando el sábado por la noche llegamos del aeropuerto a las 20:30 el hotel nos preparó un bocata -fiambre y 4 pedazos de pan- para cenar (esto que dicen las críticas previas es cierto. No olvides que a las 9 de la noches el hotel está cerrado, no hay bar, no hay luces, no hay gente... Si pierdes tu llave te costará 5 euros. Zell nos gustó mucho, una semana fue poco tiempo. El Frieberg es mucho mejor que lo que dicen las críticas que he leído. Las señoritas del restaurante son muy agradables y están encantadas de servirte. Más