En la primera noche de mi gira por Alaska estuve en el hotel Garden Inn. Normalmente son mucho más baratos que los hoteles Hilton corrientes, pero esta vez fue un pelín demasiado caro comparado con otros sitios que ofrecen una calidad similar o mejor (por ejemplo el Springhill de Marriott). Las chicas de recepción no eran muy profesionales (cuchicheando y bromeando mucho) aunque eran muy amables; es algo distinto que pude apreciar. No había desayuno incluido, aunque siempre hay café, té y chocolate a disposición. Las habitaciones son cómodas, grandes y están limpias. También el acceso gratuito a Internet fue de agradecer. El vestíbulo estaba bien decorado y los restaurantes también tenían buena pinta (el personal es muy agradable a primera hora de la mañana), aunque yo comí en otro sitio. Se puede decir que si el precio fuera correcto te darían el servicio que cabe esperar de un HI Garden Inn. No obstante, yo lo reservé por 170 $ mientras más tarde descubrí que el Springhill Suites me hubiera costado sólo 100 $.