Buen hotel y céntrico. Tuvimos problemas a la entrada ya que no pudimos acceder a la habitación hasta las 15,04 horas y la excusa fue que estaba mal la página web ( ? ).. El restaurante magnífico, impresionante la fabada y el arroz con leche..., de llorar, cremoso y untuoso, el mejor que he comido en Asturias. Los camareros atentisimos y muy amables.