He estado en la casa en varias ocasiones porque me encanta. Tiene dos terrazas, una que puedes usar por las mañanas y otra por las tardes/noches, son enormes y puedes cenar y desayunar y los niños pueden jugar y los mayores hablar y compartir. La última vez estuvimos dos matrimonios con 4 niños. La casa es muy amplia y cómoda. Tiene todo tipo de utensilios de cocina, que es de agradecer. Hay un restaurante muy cerca, y hacen unas paellas de escándalo, "el Ferrero". A una calle de la playa, es una segunda línea. Los dueños son encantadores, lo dejan todo limpio y ordenado y están disponibles para ayudarte en lo que necesites. El trastero es enorme, para guardar todos los trastos de playa. La urbanización está genial, muy agradable y con ambientillo para los niños.Sólo tengo buenas palabras.