En algo tenemos que darle la razón: en Dénia hay sitios fabulosos para ir a comer. Dicho esto, no podriamos saber como hacer para complacer a todo el mundo. Si como indica, había mucha gente en el local y atendimos de forma "express", otras personas estarían encantadas de ser atendidos con prontitud en un establecimiento lleno de clientes.
En cuanto al hecho de que no quedasen existencias de algún plato en la carta, debe usted saber que trabajamos con producto fresco y hay imponderables, como puede ser un temporal o el desabastecimiento de la lonja, que pueden ocasionar falta de algún producto circunstancialmente como pueda ser un día con muchos comensales. Hubiesemos deseado que expusiera al camarero sus preferencias respecto del perejil, que en contra de lo que pueda decir, no se utiliza pra disfrazar nada, es una herbácea sana y naturalmente empleada en esos platos.
Cuando leemos una reseña en la que hay una enmienda a la totalidad, es decir, todo estaba mal, acabamos sospechando que un cliente no es objetivo y está condicionado por una mala experiencia en algún momento de su comida. Es de utilidad saber como somos percibidos, pero hay comentarios hechos desde la fatalidad y el negativismo de una experiencia que condiciona todo, sabemos que nuestra cocina es de calidad, podemos errar puntualmente, pero no es posible que toda una comida sea tan mediocre. Podría haber algún producto que no se ajuste a sus preferencias y solo debía comunicarlo.
En fín, que no es fácil satisfacer a todo el mundo.