Hemos pasado unos dias en este hotel por primera vez, habiendo visitado previamente algunos otros de la cadena y he de decir que nos ha sorprendido gratamente.
Para empezar, nada más llegar, el trato por el personal de recepción fue muy cercano y nos explicaron todo detalladamente, claro y conciso.
Subimos por el panorámico y tras andar por los largos pasillos llegamos a nuestro cuarto, 322, con unas dimensiones y unas vistas al mar que te hacían sentir como en casa, además super limpio, cuidado al detalle.
Con el régimen que llevaba pudimos disfrutar tanto del bar de la piscina como en el buffet. Nos sorprendió la amplitud de la zona de piscina, hamacas libres y bien mantenidas.
También aprovechamos para ir al spa, donde la compañera nos indicó su funcionamiento y fue muy amable.
Mención especial para animación, con los bailes del aquagym motivados por Pablo y Cristian, y los juegos en la piscina donde fuimos un poco mancas y tuvimos nuestra merecida humillación jajaja.
Un fuerte abrazo para el responsable de recepción Rafa y al gerente Antonio por su trato, profesionalidad y por trabajar dia a dia en que el hotel funcione de la forma que lo hace, motivo esencial por el que volveremos el año que viene.
Saludos de Jessica & Gloria