Es un lugar encantador para descansar, alejado del bullicio y estrés urbano. El temazcal es una delicia. Los masajes son maravillosos, como para pedir todos. Los desayunos incluídos en el paquete son algo simples. La tarifa por paquete de fin de semana es muy buena, en comparación con los precios que se manejan en Tepoztlán. Definitivamente regresaré.

lo mejor que encontramos "costo-beneficio", con jardines cuidados, cuartos cómodos, temazcal y masajes increíbles. no es pretencioso pero te da más de lo que ofrece. El trato del personal realmente cálido, atento a lo uno necesite. muchas gracias. Elvira & Martín

Hace años en Tepoztlán había sólo tres hoteles. Uno de ellos Posada del Valle, el único junto al rio y en medio del bosque. Cuando lo conocí tenía diez habitaciones y era un pequeño lugar encantador. Hoy tiene quince cuartos y sigue siendo pequeño y acogedor. Los dueños y sus colaboradores son los mismos de siempre, cuidan el lugar y son amables con los clientes. El lugar no es pretencioso, pero está muy bien para descansar y disfrutar un temazcal y un buen masaje. Los cuartos son sencillos pero cómodos. El restaurant no tiene una gran carta, no es la gran cosa, pero se come rica comida casera. Hay dos Silvias, la gerente y la cocinera, con más de diez años en el hotel, son unos ángeles. Veo muchas críiticas y quejas, que no comparto. Una vez me toco escuchar una discusión del dueño con una inglesa que exigía en vano que le vendieran mota, y amenazó con desprestigiarlos. Esas cosas pasan, pero por suerte hay más gente buena vibra que mala honda. También críticas que parecen escritas por la competencia. Supongo que es inevitable. Yo le mando un saludo al equipo de Posada con mucho cariño y los recomiendo de corazón. John Sams, el gringo de Puebla.